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El teatro-cine Ateneo, uno de los edificios más emblemáticos de la ciudad de Vinaròs, primer cine de la comarca y uno de los primeros de la provincia en contar con un equipo sonoro, ya pasó a la historia con su derribo para construir modernas edificaciones, aunque se conservará parte de su fachada. Fue promovido en el año 1909 por el entonces alcalde D. Felip Ferrer Flos. D. Luis Roso Bover, empresario y hombre de alta posición en la población, gestó las obras del nuevo local que fue inaugurado el 16 de febrero de 1911 con la ópera "Lucia de Lamermoor". A partir de esa fecha, las funciones teatrales se sucedieron de manera regular, tanto por compañías profesionales como por las de aficionados locales. Por el Ateneo (así denominado porque pertenecía a la entidad del Ateneo Mercantil) desfilaron artistas de la talla de Margarida Xirgu y Enric Borrás en las postrimerías de los años 20. En 1914 se proyectaron peliculas con motivo de un festival de boy-scouts. En el año 1916 se anunciaba en la prensa como el "Palacio del Cine", con "una proyección fija, clara y sin oscilaciones, no molesta a la vista", con "extraordinarios estrenos de notables películas de mayor fama mundial y de éxito asegurado". El local fue regentado en ésta primera época por Doña Sabina Tosca, la cual se encargaba de las proyecciones, para las cuales se utilizaba un proyector que funcionaba a manivela. Posteriormente pasó a manos de D. Anselmo Tormo. Las primeras sesiones, al ser mudas, debían de ser amenizadas por un pianista, tanto en la proyección como en el cambio de rollo. Se dedicaron a este cometido Angelita Cruz y el conocido por "El seguet", pianista ciego que se limitaba a ilustrar sonoramente el ambiente al no poder seguir, lógicamente, el argumento. Posteriormente se dedicaría a ello el conocido músico D. Tomás Mancisidor.

En 1927, al entrar D. Juan Carsi en el negocio, la música ambiental fue orquestada por un grupo de amigos encabezados por el conocido como "Antoniet", quienes emulaban con instrumentos los varios sonidos del film. De las proyecciones se encargaron Paco Ten y Antonio Doménech "Fabrilo", quien se encargaría durante años de pintar los carteles anunciadores de los films. Se abrió una nueva etapa en la cual el teatro empezó a funcionar como cine de manera regular, negocio que aparecía ante el propietario con un futuro prometedor tal y como había conocido en la ciudad condal; aunque alternándose aún con las funciones teatrales que iban por entonces a la baja. Sin embargo, se ocupó de contratar a las mejores compañías que estaban en gira. Actuarían en el cine-teatro entre otros, Joan Bonafé, Carmen Moragas, María Palou, Renata Tarragó, Carmen de Lirio, Mª Fernanda Ladrón de Guevara o la bailarina La Riojanita.

Cuando el cine empezó a ser sonoro, se instaló en el año 1932 un moderno equipo de sonido "Pergam" con un descomunal altavoz tras la pantalla, que se inauguró con el film "Mama". La guerra civil marcó el devenir del cine. Ocupada Valencia y Barcelona se proveyó de films traídos desde Bilbao, con la consiguiente demora. Ante ello se disponía de una cinta pirata, "Paganini", que se reponía una y otra vez. Así mismo, el cine funcionó para la Legión Cóndor afincada en Vinaròs que necesitaba de distracción. El mismo propietario se desplazó en varias ocasiones, en avioneta, desde la vecina población de La Sénia hasta Burgos para proveerse de material a través del Departamento Nacional de Cinematrografía. Proyecciones que estaban reservadas exclusivamente a los soldados. Terminada la guerra, el local se reabrió al público con importantes reformas. Corría el año 1942, aunque esta es ya otra historia que se prolongaría hasta hace unos años, cuando el cine cayó en picado en Vinaròs, cerrándose en poco tiempo todos los locales que había.
(Extractado del texto de Emili Fenollosa - Vinaròs News)

Colaborador: Severiano Iglesias Tortosa