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El origen del cine en Sabadell está unido a la personalidad de Marçal Ballús Bertran (1871-1937), dentista de profesión, quien entró en contacto con los inventores del cine Hermanos Lumière a quienes adquirió un aparato con el que montó una barraca estable, digna y espaciosa, inaugurándola el 2 de febrero de 1901. El 6 de diciembre del mismo año un incendio destruyó la barraca. Entonces Ballús arrendó por diez años el Teatro Cervantes, en la Cruz Alta, local que ya llevaba abierto desde 1879 y tenía un gran escenario, adaptándolo para convertirlo en cine estable, primero mudo y luego sonoro a partir de 1930. Desde el Cervantes Ballús creó una red de cines en Cataluña y por toda España. La Pista Cervantes estaba en el recinto interior del edificio y allí se celebraban grandes bailes con orquesta y actuaciones de artistas. El Cervantes fue cine pionero y también fue el primero en cerrar en la segunda mitad de la década de los 60.

Colaborador: Severiano Iglesias Tortosa