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El Teatro Principal es una obra de Olot incluida en el Inventario del Patrimonio Arquitectónico de Cataluña. Está ubicado en el Ferial de la capital de la Garrotxa. Las primeras referencias se remontan a mediados del siglo XVIII. De dimensiones más bien pequeñas se le da más amplitud a partir de 1842. Las guerras carlistas lo dañaron provocándole un incendio el día 11 de marzo de 1874. En 1875 se decide recuperarlo. Las obras durarán 12 años inaugurándolo el 3 de agosto de 1887, casi igual que ha llegado a la actualidad.

En diciembre del año 2020 el Teatro fue declarado Bien Cultural de Interés Nacional, en la categoría de Monumento Histórico.

Presenta tres entradas con arcos de medio punto. Entre los espacios los arcos hay un medallón con una esfinge. En el segundo piso hay un balcón con balaustrada y tres puertas con dintel decorado, las laterales con frontón triangular y la central con uno semicircular.

Al lado del balcón hay dos ventanas con balaustradas y un dintel decorado. El tercer piso está formado por una serie de pequeñas ventanas junto a las cuales hay una decoración vegetal. El edificio tiene una cornisa que queda rota por un frontón semicircular donde se encuentra el escudo de la villa.

A medida que avanzó el siglo XIX y especialmente durante la segunda mitad, los módulos neoclásicos, sin desaparecer del todo, dan paso a una arquitectura mucho más historicista y ecléctica, es decir, reinterpretación decimonónica -imitación y mezcla- de estilos del pasado : románico, gótico, barroco, etc.

En esta línea se situaría el Teatro Municipal de Olot, reedificación de otro anterior (1842), quemado en un incendio en 1874. Esta reedificación la llevó a cabo Martí Sureda i Deulovol (1822-1890), uno de los arquitectos más significativos del siglo xix gerundense. Sureda tuvo una intensa actividad como profesional y teórico de la arquitectura. Destacó como urbanista, constructor y restaurador. Fue arquitecto municipal de Girona (1847-59) y provincial (1859-75), creó una Escuela de Obras Públicas, el Museo Provincial y fue miembro de la Comisión Provincial de Monumentos, donde elaboró ​​(1856) un inventario de monumentos provinciales.

En la reconstrucción del Teatro de Olot utilizó su típico estilo monumentalista que se refleja especialmente en las tres arcadas de la planta baja. La fachada fue rehecha de nuevo en 1902 por Pujol, Cordomí y Toronell, así como la ornamentación interior.

Colaborador: Mercedes Zanón