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Fue uno de los cines emblemáticos de Terrassa, junto con el Cine Cataluña y Teatro Principal. Inaugurado en el año 1935, tenía una capacidad de 2.400 butacas y estaba ubicado en la Rambla de Egara, 142-146. Su inauguración el 11 de Abril de 1935 causó sensación en la ciudad, ya que se trataba de un edificio de notable interés arquitectónico y que, con el paso de los años, apenas sufrió cambios, si exceptuamos la sustitución de sus primeras sillas de madera por otras butacas más confortables. El Rambla era un local arquitectónicamente de prestigio, construido con buenos medios y buenas calidades. Excelente estética, decoración, accesos, visibilidad, acústica y con los mejores adelantos técnicos de la época. El precio de la entrada, en su primera sesión, fue de 1,25 Ptas. En platea y de 1,50 la preferencia. Aparte de cine, también se utilizó como teatro en algunas ocasiones, así como para festivales y revistas, ¡tan de moda!, en los años 50 y 60 principalmente. Su andadura llegó hasta principios del año 2002 en que cerró esta última gran sala del Vallés. Al ser un edificio histórico, y con protección oficial del Ayuntamiento, se ha conservado el edificio y el cine tal cual eran a excepción de algunas modificaciones interiores con el fin de adaptarlo a las nuevas modas con una tienda de Zara. Cuando entras en la tienda, te da la sensación que aun estás en el viejo cine; puesto que se ha conservado lo más parecido posible, incluso su pantalla, con sus cortinas granates de terciopelo, pese a que ya no se proyectan películas, sino publicidad estática de su actual propietario. Por lo menos con su presencia, aun nos queda el recuerdo de aquella época y forma de ver y hacer cine en su momento dorado, el cual quedará grabado en nuestro corazón.

Imágenes y texto aportados por Pere Roig Berenguer