Más imágenes

Navegando por las redes nos hemos encontrado con este bonito relato publicado en Benisadigital.es, en fecha 10-06-2010, que nos permitimos incluir aquí extractado: `Hoy quiero hablarles del Cine Goya de Benissa y el que escribe tiene ya unos cuantos años (¡pero no tantos!), así pues, sólo conocí los últimos años del Cine Goya y, claro, cómo no, las sesiones del Cine de Verano del mismo nombre. Sus butacas rojas, comodísimas hasta donde me llega la memoria, su "gallinero", su escenario, sus inmensas cortinas que se abrían para dar paso al NO-DO, que debo de nombrarlo, porque forma parte de mi historia visual en el Goya, y, desde luego, las películas; fueron sin duda momentos que marcaron mi niñez. A mi mente llega el momento cuando compraba las palomitas dulces caramelizadas y abría el envoltorio, el olor a dulce hacía que se me hiciera la boca agua, los quicos, los gusanitos, los huesitos... daba igual, para un niño todo estaba buenísimo. También, siempre ocurría el siguiente "rito": en las escaleras que subían al "gallinero" o a la sala de proyección se sentaban los "mayores" a charlar o fumarse su cigarro antes de dar comienzo la película y siempre los miraba de soslayo, pensando en qué momento uno se convertiría en un "adulto" como ellos. Cuando la proyección se cortaba por cualquier causa la gente golpeaba con sus pies en el suelo, a modo de tamborrada, y parecía que todo temblaba. Eso siempre me resultó curioso, el ruido aún lo conservo en mi memoria de sonidos. Poco tiempo después de aquella época se irían cerrando los cines, no solo de Benissa, sino del resto de la comarca, y, aunque aguantó unos años más el cine de Gata, al que acogimos los jóvenes como nuestra "última tabla de salvación" para poder salir con nuestros amigos y/o parejas, finalmente también sucumbió. Hoy vuelve a existir el cine en Benissa, en la última planta de la Cultural, donde a Dios gracias nuestros jóvenes al menos tienen un lugar para poder disfrutar de las películas, pero eso ya es otra historia. Para el que quiera conocer un poco más de nuestro Cine en Benissa recomiendo la lectura del libro de fiestas del año 1994.

Según el Anuario del cine español 1955-56, el empresario era Francisco Puig, dotado de 550 localidades, funcionaba los días festios y los sábados y data su apertura en 1924( Entonces se llamaba Cine Doré)

Colaborador: Severiano Iglesias Tortosa